LA IMPORTANCIA DE PASAR RECETAS DE UNAS GENERACIONES A OTRAS
Detrás de cada plato, ya sea dulce o salado, existe una receta con un largo recorrido en el tiempo que nos permite degustar toda una delicatessen.
Estas recetas tradicionales nos ofrecen la sabiduría y garantía de poder disfrutar de una alimentación sana y equilibrada que se transmite de generación en generación. Se trata de elaboraciones que se basan en alimentos naturales, proporcionando el mejor sabor gracias al uso de ingredientes de la más alta calidad.
De ahí que sean unos productos tan populares y apetecibles tanto para los mayores como para los más pequeños de la casa.
Además, el simple hecho de poder tomar una rica galleta o bizcocho que de repente nos traslade a aquellos tiempos en que los hacían nuestras madres o abuelas haciéndonos revivir el momento, es uno de esos pequeños placeres de la vida que solo se puede conseguir gracias al paso de las recetas familiares de unas generaciones a otras.
Tradición y Cultura
Si nos remontamos a los orígenes de la repostería en Extremadura, deberíamos trasladarnos a la época romana. Fueron posteriormente los árabes, quienes nos dejaron su legado tanto cultural como gastronómico. Así como en la Edad Media, monasterios y conventos también pasaron a dejarnos su influencia en dulces y pasteles.
Como vemos, la gastronomía está estrechamente vinculada a nuestra cultura, a cada uno de los pueblos que pasaron por nuestra tierra. Sin embargo, no podemos olvidarnos del otro gran factor influyente, la familia, la transmisión oral de padres a hijos por cada uno de los ingredientes, por el secreto de esa receta que nos permite seguir disfrutando de ella.
Por todo ello, es tan importante compartir, escribir y conservar las distintas recetas. De este modo, las futuras generaciones podrán continuar elaborándolas y divulgando la riqueza del arte culinario de cada zona o región.
Otro aspecto fundamental es que las empresas dedicadas a la repostería y alimentación mantengan la tradición, ya que el estilo de vida que llevamos hoy en día ha cambiado de tal manera que pocos son los que tienen tiempo de recuperar y mantener esas recetas.
¿Cómo se Transmiten las Recetas?
Como decíamos, las recetas pueden transmitirse de generación en generación en el transcurso de la historia de los pueblos a través de la tradición oral o bien, pueden escribirse a través de la selección de recetas ya recopiladas para la edición de un libro de cocina o para recetarios de uso propio.
Este conocimiento recopilado es una parte importante de nuestra cultura, por lo que su evolución nos permite conocer los continuos cambios a los que estamos sometidos, incluyendo la economía, ya que en función de esta utilizaremos una materia prima u otra.
Igualmente, su uso en diferentes estudios sociológicos nos permite conocer cuáles son nuestros gustos e influencias gastronómicas en cada etapa de la Historia.
Repostería Extremeña en la Actualidad
Además de la importancia de mantener la tradición con la que se verá favorecido el desarrollo económico de nuestros pueblos, también es esencial saber adaptarse a los nuevos tiempos.
Es decir, hoy en día, como sabemos hay diferentes alternativas también en la repostería para aquellas personas con intolerancia a la lactosa, al gluten, con diabetes, o simplemente por una cuestión de preferencias. Por ejemplo, hay quien no quiere abusar, o directamente prefiere evitar los dulces con azúcar.
Así pues, la repostería va evolucionando a su vez con la sociedad, con los nuevos estilos de vida. Se van incorporando nuevas fórmulas e ingredientes para que todos puedan disfrutar de un delicioso dulce, eso sí, sin perder el sello de lo tradicional. De esta manera, lo que se consigue es adaptar ciertas recetas para enriquecerlas y contribuir con ello a los nuevos modelos de alimentación.
En conclusión, el paso de recetas de unas generaciones a otras nos permite preservar nuestra cultura gastronómica, divulgarla y conocerla a través de los mejores productos de nuestra tierra.